Dos opciones para comprar una propiedad sin ahorros
Comprar una propiedad continúa siendo el sueño de la mayoría de los chilenos y para muchos el gran impedimento es el monto inicial o “pie” que exigen las constructoras e inmobiliarias. La recomendación frecuente que hacen ejecutivos comerciales, asesores y especialistas en el rubro inmobiliario a los clientes es ahorrar para poder reunir el dinero que se requiere y así no tomar más deuda de la necesaria. Pero esto no siempre es una opción. Las dificultades económicas y el alto costo de la vida hacen que para muchos chilenos sea cuesta arriba ahorrar.
En este contexto, hasta hace algunos años, los bancos y otras instituciones podían financiar hasta un 90% del valor de la propiedad, e incluso en algunos casos especiales o excepcionales, se lograba el financiamiento del 100% de éstas. Sin embargo, actualmente la situación es distinta, y por general se entregan créditos hipotecarios con un tope del 80% del valor total, por lo que siempre es bueno conocer algunas alternativas que pueden ser útiles a aquellos que busquen opciones de compra, ya sea para vivir o como inversión.
Compra en blanco o verde
Comprar propiedades en blanco es cuando el proyecto cuenta con el debido permiso de edificación o adecuación del terreno, pero las excavaciones aún no comienzan. Es decir, está en papel, en planos.
Por otro lado, comprar en verde es la promesa de comprar una vivienda que está en construcción. En estos casos las inmobiliarias suelen ofrecer la alternativa de pagar el pie en cuotas y sin intereses. Además, el inversionista podrá pagar durante los meses que demore la recepción del proyecto, que habitualmente demora entre 12 y 30 meses.
Bono Pie
Esta es quizás la mejor alternativa, pero también la menos conocida. Se trata de un préstamo intangible que algunas inmobiliarias realizan al cliente. Por lo general, en esta opción la empresa presta la mitad del pie, por lo que el cliente solo debe poner la otra mitad. Esta alternativa no funciona sólo para propiedades nuevas, sino que también antiguas. Por ejemplo, algunas empresas entregan un bono pie que va desde un 5 a un 15%, en propiedades usadas.
En tanto, el pago va a depender de la política de cada inmobiliaria y la negociación que se haya realizado con el cliente, por lo que puede ser a través de tarjeta de crédito, cheque o incluyéndolo al total del valor de la propiedad.
Fuente: Biobiochile.cl