Los cuatro puntos más importantes al firmar un contrato de arriendo

El reembolso del mes de garantía, las cláusulas y los costos extras asociados a reparaciones son materias importantes de un contrato de arriendo. No obstante, no todas las personas saben cuáles son los puntos que merecen mayor atención, principalmente para evitar disputas y malentendidos cuando llegue el momento de dejar la propiedad.

En este contexto, expertos en el área de renta residencial destacan cuatro aspectos importantes para que el arrendatario sepa qué considerar en el proceso de ingreso y salida de un inmueble. Acá te detallamos cuáles son estos puntos principales:

1- Entender el rol de este documento: El contrato de arriendo es un documento que establece las condiciones entre las partes (arrendador y arrendatario) y se firma antes de entrar a la propiedad. Se trata de un instrumento privado que determina derechos y deberes de las partes, que además puede incluir otros acuerdos que éstas estimen convenientes. Por ello es importante que el arrendatario cuente con la asesoría de un especialista o empresa del rubro para comprender correctamente lo que conlleva dicho compromiso.

2.- Asegurarse de que todo esté funcionando: Antes de firmar un contrato, verifique que la vivienda esté en óptimas condiciones y sin desperfectos que la inhabiliten para su buen vivir. Si los tiene, acuerde los arreglos que corresponde resolver al dueño. Es muy importante revisar que no haya ningún daño estructural, humedad, que los acabados en pisos y puertas estén en buen estado. También hay que comprobar el funcionamiento del calefont, las llaves (por si hay goteras) y el cierre de ventanas. Estos aspectos son relevantes, así como se sugiere dejar constancia con imágenes del estado de la vivienda a la hora de la entrega.

3.- La garantía y su reembolso: Este punto puede ser un verdadero foco de conflicto si no se conoce bien lo acordado en el contrato, por lo que es muy importante entenderlo. La garantía se utiliza para cubrir los deterioros o perjuicios causados al inmueble y los gastos pendientes de cobro al dejar la propiedad. Por tanto, es esencial comprender el rol que cumplen estos recursos para no esperar la devolución del total (100%).

4.- Término del contrato: Otro de los ejes principales de un compromiso de arriendo está en el período de residencia acordado. Este proceso debe estipularse en el contrato, aunque la norma general indica que ambas partes pueden poner fin al mismo avisando con 60 días de anticipación a la fecha de término. En este punto es vital considerar que en varios casos, según las cláusulas del contrato, un cierre anticipado puede establecer multas y el no reembolso de la garantía. En cualquier caso, la Ley de Arrendamiento regula los plazos contractuales que, por lo general, son a un año con o sin renovabilidad.

Fuente: El Mercurio