Ñuñoa y Macul: Lo que hay que saber para invertir en estas comunas

Las comunas de Ñuñoa y Macul, en la Región Metropolitana, son las más dinámicas en términos de incorporación de proyectos y crecimiento en la oferta de departamentos, aumentando el valor en UF por medio cuadrado, según reporta el más reciente estudio elaborado por GfK. Factores como conectividad, el entorno, el desarrollo comercial y la calidad de vida son los principales elementos que un futuro propietario busca en un departamento en estas comunas, y que determinan el alza de desarrollo de proyectos, como también la alta demanda. 

Pero el porqué sectores de estas comunas han captado el interés de desarrolladores inmobiliarios y qué —precisamente— atrae a los futuros propietarios lo explica Colett Aravena, del Grupo Premium Inversores: quienes compran para invertir o vivir en estas comunas lo hacen considerando factores que tanto Ñuñoa como Macul cumplen a cabalidad. En primer lugar, la conectividad.

Ambas comunas están conectadas por las líneas del Metro de Santiago. Ñuñoa por la línea 3, 4 y 6; y Macul por la línea 4. Además, cuentan con avenidas principales como Tobalaba, Bustamante, Pedro de Valdivia y la misma avenida Macul. "Otro atributo que beneficia la conectividad de ambas comunas es el desarrollo de ciclovías que impulsan un estilo de vida más saludable", dice Aravena.

El entorno es probablemente uno de los factores que más consideran desarrolladores e inversionistas a la hora de decidirse por un proyecto. Y en este apartado, ambas comunas cuentan con parques, plazas y áreas verdes. También son consideradas comunas seguras y con bajos focos de delincuencia, y aunque con la llegada del Metro y la población flotante haya nuevos sectores que resguardar, estas tienen altos índices de seguridad. El desarrollo comercial es un punto relevante a la hora de tomar una decisión.

La ejecución de obras de infraestructura con fines comerciales, como malls como stripcenters, desarrollo gastronómico y servicios, han elevado la oferta inmobiliaria en las respectivas zonas y sus alrededores. Todos estos puntos señalados complementan un solo concepto: calidad de vida. Las condiciones socioculturales y laborales, además de estos factores, han llevado a que Ñuñoa sea la sexta comuna con mejor calidad de vida en Chile, como lo indica el Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la Pontificia Universidad Católica y la Cámara Chilena de la Construcción. En el caso de Macul se ha logrado elevar de manera consistente estos estándares convirtiéndola hoy en una comuna en constante desarrollo.

Fuente: La Tercera